Condenamos la declaración afirmada hoy (27 de julio) en nombre de la UE, relativa a Maraş. Ésta y otras declaraciones similares poco realistas, que ignoran al pueblo turcochipriota y reflejan únicamente las opiniones de la parte grecochipriota, no tienen ningún valor ni validez para nosotros.

Esta posición sesgada de la UE, mostrada con los pretextos de la solidaridad de los miembros y las preocupaciones de veto, no es útil para la solución de ningún problema.

Apoyamos plenamente todas las decisiones tomadas por las autoridades de la República Turca de Chipre del Norte (RTCN) y sus propuestas relativas a la solución de la cuestión de Chipre y la iniciativa de Maraş.

La iniciativa de Maraş es una decisión del Gobierno de la RTCN. La UE debe cumplir sus compromisos con el pueblo turcochipriota tras el Plan Annan de 2004 y aprender a dirigirse a la RTCN.