Es muy lamentable que el Presidente de Francia, Emmanuel Macron, haya hecho declaraciones dirigidas a nuestro país junto con algunos otros países durante su visita a Argelia.

Es inaceptable que el Presidente de Francia, Macron, que tiene dificultades para enfrentar el pasado colonial de su país en África, especialmente en Argelia, trate de deshacerse de su pasado colonial acusando a otros países, incluyendo a Türkiye.

Türkiye, que fomenta la amistad, en lugar de la hostilidad, y se encuentra entre los socios estratégicos de la Unión Africana, desarrolla día a día sus relaciones tanto con Argelia como con otros países del continente africano, y estas relaciones basadas en la confianza mutua y en el principio de beneficio mutuo, avanzan respetando la voluntad de los propios países.

Si Francia supone que hay reacciones en su contra en el continente africano, debe buscar el origen de estas reacciones en su propio pasado colonial y en sus esfuerzos por perseguirlo todavía con diferentes métodos y debe intentar repararlo. Afirmar que estas reacciones son causadas por las actividades de terceros países, en lugar de afrontar y resolver los problemas relacionados con su propio pasado, no sólo es una negación de los hechos sociológicos y de la historia, sino que también refleja una mentalidad distorsionada de algunos políticos.

Esperamos que Francia alcance cuanto antes la madurez necesaria para enfrentarse a su propio pasado colonial sin lanzar acusaciones a otros países, incluido Türkiye.